En segundo día del Mobile World Congress (MWC), inaugurado ayer 22 de febrero en Barcelona, se ha presentado oficialmente el primer teléfono modular del mundo, el LG G5, que promete revolucionar la industria de los móviles con una tecnología nunca antes vista.
El LG G5 es un moderno smarthphone equipado con un puerto de expansión que, instalado junto a la ranura de la batería, permite transformar el equipo en otro dispositivo al añadirle una serie de funciones especializadas.
De esta manera y con ayuda de accesorios como el módulo LG CAM Plus, será posible que el usuario convierta su móvil en una exclusiva cámara de fotografía y vídeo con características propias, sin interrumpir la función telefónica regular ni entorpecer la conectividad.
El LG G5, que además de ser el primer teléfono modular de la historia se perfila como el último buque insignia de la compañía LG, cuenta con procesador Qualcomm Snapdragon 820, 4 GB de RAM, memoria interna de 32 GB ampliable hasta los 2 TB, pantalla de 5.3 pulgadas con resolución de QHD, cámara de 16 megapíxeles y sistema operativo Android 6.0 Marshmallow. Las primeras unidades estarán disponibles a la venta entre las OMVs el próximo mes de abril.
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